Popayán
(Cau.), 14 de mayo de 2013.- Con
lágrimas en los ojos y visiblemente emocionada, la instructora de ética y
valores, Paula Guarín, se dirigía a sus pupilos, en el
auditorio: “Tengo el
corazón hinchado de emoción al tener en mi salón, aprendices tan humanos”, al
referirse a los aprendices del Técnico en Sistemas del Centro de Comercio y
Servicios de la regional Cauca.
La emoción y el orgullo no son para menos, los aprendices y la
instructora, recibieron su certificado en “lenguaje de señas” otorgado por la
Asociación de Sordos de Popayán, quienes dieron curso intensivo, en este tema.
La culpable
de esa motivación para el aprendizaje de señas, tiene nombre propio: Heidy
Maritza Fajardo, aprendiz de 18 años, con discapacidad auditiva, quien al ingresar
al técnico en sistemas encontró algunos problemas en su proceso de adaptación
con sus compañeros; Desde que inició sus clases, en el mes de abril, arrancó
con mucha emoción por haber logrado su ingreso al SENA, con el pasar de los
días empezó a sentirse temerosa, aislada, triste y confundida, era difícil
comunicarse con los compañeros, aunque Maritza, estudia con su hermana quien es
su intérprete, anhelaba poder comunicarse con los demás sin acudir a ella,
quería expresarse mejor con los aprendices; su instructora de ética le
preguntaba si entendía y ella con señas respondía que no, por eso su felicidad
al ver que su instructora y sus compañeros se motivaron para aprender este
lenguaje.
Fue así
como, gracias a la instructora Paula, contactaron a miembros de la Asociación
de Sordos de Popayán, la cual aceptó la invitación y les dictó un curso
intensivo de 20 horas, que los aprendices aceptaron gustosos. “Más que un problema fue una oportunidad
para hacer un proceso de apoyo para el grupo y para la persona con discapacidad,
las personas no sabemos que los sordos viven de las señas para lograr
comunicarse, ahora ya podemos comunicarnos con ella sin necesidad de su
interprete”, indicó la instructora de ética, Paula Andrea Guarín.
Durante
la evaluación, los aprendices no ocultaban sus nervios, los evaluadores (con
discapacidad auditiva) los bombardearon, uno a uno, con muchas preguntas en su
lenguaje de señas: cómo te llamas, cuántos años tienes, dónde vives; que haces
en tu tiempo libre, cuál es tu estado de ánimo, que hiciste el fin de semana,
fueron las respuestas que tuvieron que dar los aprendices, todos contestaron
con señas de manera acertada lo que los hizo acreedores a su certificación. “La Asociación está satisfecha con el
trabajo logrado por los aprendices, quisimos hacer este proceso de enseñar el
lenguaje de señas en aras de que le puedan ayudar a Maritza a comprender
algunos temas. Ya hay comunicación entre oyentes y sordos, con esta
capacitación”, aseguró Amelia Gonzales, secretaria de la Asociación de
sordos de Popayán.
Maritza no podía ocultar su felicidad, le
brillaban los ojos, estaba hiperactiva, abrazaba a sus compañeras, consentía a
la instructora y con su lenguaje de señas expresaba su gratitud, mostraba todo
lo que sentía y tomaba fotos de la entrega de los certificados de sus compañeros.
“Ella dice que está muy feliz, que antes
tenía mucho miedo de estudiar, que ahora sus compañeros le ayudan, y que está
más tranquila porque sus amigos ya se pueden comunicar con ella y se siente en
familia” afirmó su hermana, Melisa Fajardo.
Su
hermana, tampoco escondía su emoción mientras ayudaba a sus compañeros a
practicar, antes del turno de la evaluación, “Me parece bien que aprendan el lenguaje de señas porque a veces no
estoy o de pronto falto a clase, entonces ella ya puede venir sola sin mi y
apoyarse en los compañeros para que sea más fácil su aprendizaje, ya puedo
estar más tranquila” indicó.
Con este proceso, se espera que los compañeros de
Maritza puedan ayudarle en su proceso de aprendizaje, “Aprendimos a comunicarnos con Maritza y me gustó mucho, este lenguaje
nos sirve para todos porque si alguna persona sorda necesita ayuda podemos
entenderlo y ayudarle, a mi me aportó mucho, además que todos queremos apoyar a
Maritza” señaló Maira Truque, aprendiz del Técnico en Sistemas.
Aunque las clases de ética finalizaron, los
aprendices esperan realizar un segundo nivel para mejorar el aprendizaje,
mientras tanto, continúan su proceso practicando y apoyando a su compañera.
Lenguaje
de señas
Según información publicada por la Federación
Colombiana de Sordos en Colombia,
Fenascol, la Lengua de Señas Colombiana es una modalidad no vocal del
lenguaje humano, caracterizada por ser visocorporal -es decir se expresa con el
cuerpo en el espacio y se percibe a través de la vista- surgida naturalmente al
interior de la Comunidad Sorda colombiana por interacción de sus miembros, como
respuesta a la necesidad innata de
comunicación. http://www.fenascol.org.co.
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Para medios de comunicación
interesados, mayor información:
Emilce
Rodriguez Erazo, Comunicadora social Regional Cauca
Celular: 3148210849 /
Correo-e: erodrigueze@sena.edu.co
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